Nuestras casas son sismo resistentes, lo hemos comprobando haciendo pruebas físicas y corridas estructurales del diseño y los materiales utilizados. Usamos big bambú llamado Dendrocalamus que es cultivado en Esmeraldas y, apoyando también la economía local en Manabí. Bajo un estricto control, seleccionamos el material para inmunizarlo y poder asegurar la calidad de nuestras casas. Las casas tienen una garantía de 30 años con el mantenimiento adecuado.
El proceso de selección de las familias beneficiadas también cumple con un exhaustivo levantamiento de información sobre las familias mas vulnerables. Después de evaluar los daños por el terremoto, damos prioridad a las personas de la tercera edad, madres y padres solteros y personas con discapacidades.
Los beneficiarios de las casas tienen que pagar un porcentaje simbólico del 10% del costo de construcción que por lo general son mil dólares con pagos mensuales de veinte dólares. Este dinero es recaudado por una persona de la comunidad e invertido en la misma para apoyar a nuevos emprendimientos o negocios ya existentes.
En el estudio y la innovación de los materiales de construcción, muchas veces tendemos a volver a nuestras raíces primitivas para reinventarnos, siempre adaptándonos e incorporando las nuevas tecnologías que ha ofrecido la ingeniería a lo largo del desarrollo de la humanidad. Es por ello que inspirándonos en el pasado, presente y futuro buscamos una fusión entre lo tradicional, y la tecnología del presente, con el fin de lograr un futuro sustentable, adaptado al entorno y en función a las necesidades de los habitantes de las zonas rurales de Manabí.
Es por ello, que hoy presentamos un diseño mixto de Bambú como esqueleto estructural, con infraestructura de concreto armado, con zapatas directas y con toda la física aplicada al cálculo de estructuras sismo resistentes, donde todos los componentes de ls supra estructura son prefabricados, dando armonía durante el proceso de construcción. El Bambú es el protagonista y el concreto recubre las paredes para prevalecer en el tiempo, ante la intemperie, el agua, las plagas y el sol.